La China más dividida.

    China es un país cuya historia ha sido realmente interesante, en ella han habido un sinfín de conflictos, dinastías, acontecimientos, etc. que no solo han influido en su propio país, sino que también en todo el mundo. No obstante, entre tantas guerras, hay una que ha destacado por ser el génesis de la mayor catástrofe que han sufrido los chinos por culpa del comunismo: la Guerra Civil China.

    

    Dicho conflicto lo podemos situar entre los años 1945 y 1949. La guerra fue, básicamente, una contienda militar y política en la que se enfrentaron dos partidos por el control de China. Tenemos por un lado al Partido Nacionalista Chino, y por el otro, al Partido Comunista Chino. Los nacionalistas estuvieron dirigidos por Chiang Kai-shek y los comunistas por el famoso Mao Zedong.


    Sin embargo, hemos de remontarnos a 1927, tras la Expedición del Norte, campaña militar por la cual los nacionalistas enfrentaron a los caciques militares para unificar China y someterla a su poder. Una vez finalizada la campaña, los comunistas empezaron a realizar revueltas y fundaron el gran Ejército Rojo. Seguidamente, empezaron los nacionalistas con las campañas anticomunistas con el fin de disolver las fuerzas rojas.

    Asimismo, durante la Segunda Guerra Sino-Japonesa, China estaba dividida en tres facciones: la China nacionalista que era el Gobierno oficial, la China Comunista y las áreas ocupadas por los japoneses. Las batallas fueron muy duras durante los ocho años que duró la guerra: millones de soldados muertos en combate y muchos más por enfermedades y hambruna. Lamentablemente, la finalización de la guerra en agosto del 45 con la Declaración de Postdam (rendición japonesa debido a las bombas explotadas en Japón) no acabó con los conflictos nacionales.

    
    Cabe destacar que durante la contienda contra los japoneses, los nacionalistas con los comunistas decidieron unir fuerzas para derrotar a los japoneses. La prioridad era desocupar a los extranjeros, y más adelante, se reanudarían los conflictos civiles. 

    Por desgracia para los nacionalistas, cada vez fueron más los éxitos de los comunistas. Por otra parte, la corrupción y la inestabilidad dentro del mismo partido nacionalista acabó dejando a los rojos el terreno fértil para ganar la lucha por el poder. Una vez desocupadas las regiones bajo el control japonés, millones de comunistas fueron a posicionarse en esa zona, llegando a tomar el control de Manchuria.

    No obstante, apareció una ocasión en la que se vio la oportunidad de que ambos partidos llegaran a un acuerdo para formar una China democrática y unida en Chongqing en octubre de 1945, pero se volvieron a enfrentar antes de llegar a otro acuerdo por el que pondrían fin a las hostilidades. Tras lo sucedido, el presidente estadounidense, Truman, envió a George Marshall para sofocar las tensiones que seguían en furor en China. Una vez llega Marshall, consiguió que volvieran a sentarse para negociar y acordaron reorganizar el Gobierno chino, ampliar la representación en las Cámaras, convocar una asamblea constituyente para redactar una Constitución, reformar la política y la economía, y por último, unificar las fuerzas militares que había sido divididas por los nacionalistas y los comunistas.

    Pero antes de que todos estos acuerdos llegaran a solidificarse, volvieron otra vez las disputas entre ambos bandos en Manchuria: los nacionalistas ocuparon Mukden tras la retirada de las tropas soviéticas, mientras que los comunistas consolidaron su poder en el norte de Manchuria. Finalmente, en esta coyuntura, en diciembre del 46 una nueva constitución fue redactada por una Asamblea sin comunistas y un presidente elegido que era nacionalista. El PNC seguía dominando China.

    Todo este conflicto acabó en el año 1949, cuando los Estados Unidos decidieron dejar de apoyar la causa nacionalista porque dejaron de serles útiles, entonces, se vieron solos frente a un ejército que contaba con tres millones de soldados. Los comunistas siguieron su proceso expansionista por toda China, ocupando Tianjin. Por ello, Chiang Kai-shek decide renunciar a finales de septiembre y abandonar el poder. El 1 de octubre de 1949, Mao se autoproclamó líder supremo de China. Tras la toma de poder, comenzó a realizar una serie de reformas agrícolas, industriales y políticas nunca antes vistas en China. Comenzaba pues, una de las peores épocas (por no decir la peor) que iban a sufrir los chinos durante treinta años. Los ciudadanos no sabían el desastre que iban a sufrir...


Enlaces de interés: 

https://www.britannica.com/event/Chinese-Civil-War/Nationalist-collapse-and-the-establishment-of-the-Peoples-Republic-of-China-1949

https://www.amazon.es/El-siglo-del-socialismo-criminal/dp/1522030913

https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-49805950


Comentarios